La Cámara de Compañías Aéreas en Argentina-JURCA emitió este domingo un comunicado en el que expresan su «gran preocupación ante el agravamiento de dos situaciones que afectan nuestra operación».
En primer lugar se reportan inconvenientes para importar insumos de uso diario como tickets, etiquetas para equipajes, equipamientos de comunicaciones y computación, elementos para catering, repuestos de aeronaves, materiales para operación de rampa y equipos de detección de drogas y sustancias explosivas, entre otros, todos los cuales, explicó el director ejecutivo de JURCA, Felipe Baravalle, «frenados sin explicación por la no aprobación del Sistema de Importaciones de la República Argentina y Pagos de Servicios al Exterior (SIRASE)«.
«Hemos comunicado por distintos medios a las autoridades, pero sin éxito o apertura de canal de comunicación alguno», agregó, indicando que «se trata de insumos categorizados sin giro de divisas y son a título no oneroso», por lo que resulta inexplicable el freno.
Seguridad aérea en riesgo
En segundo lugar, desde JURCA advierten que es inminente que los aeropuertos en los que operan sus aerolíneas asociadas dejen de contar con el «Servicio de Detección y Alarma de Descargas Eléctricas» dado que el SIRASE está demorando la autorización para que el representante local pague al proveedor extranjero el costo del servicio.
“La falta de este moderno servicio y su tecnología de avanzada (que obtiene información meteorológica a través de la red de 50 estaciones de detección instaladas en todo el país), significaría regresar en el tiempo cinco años atrás y volver a una operación aerocomercial más cara, insegura, lenta y con más demoras para los pasajeros”, dijo al respecto Baravalle.
“Desde su puesta en funcionamiento, tanto las líneas aéreas como el personal de empresas de rampa, combustibles, seguridad y otros proveedores cuentan con un sistema de alarmas en cada aeropuerto (además de las sonoras y visuales en plataforma) vinculado a sus celulares el cual hoy se lo considera vital para la seguridad aeroportuaria», agregó.
La Secretaría de Comercio de la Nación ha venido reteniendo la autorización de los pagos desde noviembre de 2022 «sin ninguna explicación conveniente ni comprensión del impacto que resultará en nuestra industria», continuó Baravalle, concluyendo que «de cesar este servicio, operaremos sin la seguridad que esta tecnología nos brinda hoy».
Sistema de detección de actividad eléctrica
El Servicio de Detección de Actividad Eléctrica alerta sobre de la presencia de rayos tanto entre nubes como los que impactan en tierra, informando además el lugar de las descargas (con una precisión menor a 175 m), lo que permite estimar cómo éstos podrían afectar a los aeropuertos y sus operaciones.
Hasta 2018 sólo se contaba con la observación meteorológica para realizar dicha detección. El nuevo sistema emite una alerta amarilla cuando detecta actividad eléctrica significativa a 15 km del aeropuerto, y envía mensajes a correos electrónicos y SMS a celulares del personal operativo preseleccionado y con funciones dentro del predio. En ese caso se considera que la situación podría derivar en una alerta roja a corto plazo.
Si se detecta actividad eléctrica dentro de un radio de 5 km desde el aeropuerto, el sistema emite una alerta roja, también avisando al personal operativo, y activa sirena y luces estroboscópicas de alerta en las áreas operativas abiertas del aeródromo. Si transcurren 10 minutos sin registrarse otra actividad eléctrica, las alertas cesan y el sistema vuelve a quedar en vigilancia permanente.
La tecnología beneficia a todo el personal vinculado al despacho de combustible, movimiento del equipaje, señaleros, despachantes de vuelo, la carga de catering, carga y descarga en los aviones, el movimiento de pasajeros en rampa, entre otros.
El sistema permite además acortar los tiempos de suspensión de operaciones en los aeropuertos cuando se produce actividad eléctrica, evitando interrupciones innecesarias.
Los aeropuertos de El Palomar, Ezeiza y Aeroparque habían sido los primeros en incorporar esta tecnología en noviembre de 2018, seguidos de otros en el interior de Argentina durante 2019.
¿Y la repatriación de fondos?
Por el momento las aerolíneas en Argentina no están registrando inconvenientes en lo que suele ser uno de los más graves problemas que enfrentan en países con restricciones al acceso de divisas: la repatriación de fondos obtenidos por venta de tickets.
IATA había reportado en diciembre que las compañías aéreas tenían fondos bloqueados por más de USD 2 mil millones en diferentes mercados como Nigeria (USD 551 millones), Pakistán (USD 225 millones), Bangladesh (USD 208 millones y el Líbano (USD 144 millones). Esto sin contar los USD 3.8 mil millones que el gobierno venezolano retiene desde 2016.
Ver también: Venezuela: IATA reimpulsa gestiones para repatriar USD 3.800 millones de las aerolíneas
