Ayer empezó a viralizarse en redes sociales el video de un pasajero a bordo de un vuelo de Flybondi quien, enojado ante el desvío de su vuelo por razones meteorológicas, exigía a la tripulación que «lo bajen» en otra ciudad, llegando incluso a golpear la puerta de acceso a la cabina de vuelo, una falta muy grave.
El suceso tuvo lugar el lunes 26 a bordo del vuelo FO 5222, el cual había despegado desde el Aeroparque Jorge Newbery de Buenos Aires a las 20:29 con destino a Tucumán, cuando a las 22:02, ya en descenso, se vio obligado a desviarse hacia Córdoba debido a condiciones meteorológicas desfavorables en el aeropuerto de la capital tucumana.
Según confirmó la ultra low-cost, «frente a esta situación, un pasajero se alteró y mostró una conducta inapropiada en pleno vuelo ante la tripulación«, ante lo que «el Comandante por altavoz le indicó que vuelva a su asiento en forma inmediata«.
En el video puede escucharse cómo también se le advierte que en tierra lo esperaría la policía, lo cual finalmente sucedió, dado que el pasajero disruptivo fue puesto a disposición de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, con dos agentes basados en Córdoba escoltándolo fuera del avión.
«Estas acciones se toman para proteger a los pasajeros y a la tripulación de cualquier acto de violencia o malestar que la persona disruptiva pueda generar, como también poner en riesgo la seguridad de la aeronave«, concluyeron desde Flybondi.
😡✈️ Un pasajero de Flybondi hizo un escándalo porque su avión que no podía aterrizar en Tucumán
❗️ Debido a la niebla, el vuelo tuvo que desviarse hacia Córdoba, lo que provocó la furia del hombre. pic.twitter.com/G9CFpDyoIJ
— Rosario Nuestro (@RosarioNuestro) June 29, 2023
Los pasajeros disruptivos, un problema grave para la industria
En 2014 los estados miembros de la OACI reconocieron el incremento y la severidad de casos de pasajeros disruptivos a bordo y adoptaron el Protocolo de enmienda al convenio sobre las infracciones y ciertos otros actos cometidos a bordo de las aeronaves, conocido como Protocolo de Montreal de 2014.
Y es que, si bien este tipo de pasajeros son apenas una mínima fracción de los 4 mil millones que se movilizaban alrededor del mundo hasta 2019, sus actos tienen un profundo impacto en las operaciones, las tripulaciones y en la opinión pública.
Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), los incidentes con pasajeros a bordo crecieron durante la pandemia teniendo como detonante la necesidad de hacer cumplir la regla del uso de la mascarilla a bordo de las aeronaves.
En la primera mitad de 2022 el número de incidentes fue de 1,20 cada 1.000 vuelos, mientras que en 2021 la cifra había sido de 1.13.
Fuentes cercanas a la industria indicaron que estos indicadores son bastante similares en Argentina.
Tremendo, qué feo momento para los pasajeros y tripulación! Ojalá no lo dejen subir más a un avión.
Los pasajeros varados siguen esperando solución