Luego de que el gobierno mexicano oficializase hoy una nueva reducción en la capacidad del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) de 52 a 43 operaciones por hora, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), emitió un duro comunicado en el que manifestó su rechazo y cuestionamiento a lo que denominaron una decisión unilateral que se desvía de las prácticas internacionales y de industria que indican que los cambios de capacidad se deben llevar adelante mediante procesos colaborativos entre todas las partes interesadas, garantizando así transparencia, previsibilidad y certidumbre.
“Esta decisión del Gobierno no tiene en cuenta los intereses de los consumidores ni respeta el procedimiento consultivo necesario con los operadores y usuarios, especialmente en el principal aeropuerto del país. Estas medidas deben ser tomadas con el mayor rigor técnico y operacional, basado en estudios y análisis de expertos. En este caso, cuestionamos la metodología utilizada por SENEAM, AFAC y AICM para determinar la capacidad del aeropuerto”, dijo Peter Cerdá, vicepresidente Regional de IATA para las Américas, a través de un comunicado en el que además vuelven a ponerse a disposición del gobierno para colaborar en la búsqueda de soluciones.
El recorte de capacidad, que se da un año después del que ya pasó de 62 a 52 las operaciones permitidas por hora) y que entraría en vigor a partir del 29 de octubre próximo, tendrá un profundo impacto en la programación de las compañías aéreas y en los pasajeros.
IATA enfatiza la contradicción del gobierno mexicano dado que en 2018 un estudio llevado adelante por ellos mismos confirmó la viabilidad de permitir de manera segura un máximo de 72 operaciones por hora.
El organismo también puso de relieve cómo en teoría el gobierno obligó a trasladar las operaciones de carga al AIFA para facilitar el inicio de obras de mejoras en el AICM que nunca comenzaron. Sobre esto, Cerdá dijo específicamente que «el problema del AICM no es la capacidad de operaciones sino la antigüedad y el deterioro de la infraestructura que requiere intervención inmediata para modernizar las terminales 1 y 2«.
Desde hace varias décadas el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México es el de mayor movimiento de Latinoamérica y el Caribe (salvo por un breve período entre 2016 y 2019 en el que fue superado por San Pablo/Guarulhos).
En 2022 movilizó 46,6 millones de pasajeros. Sin embargo, este liderazgo no fue acompañado por inversiones que permitan eficientizar aún más sus operaciones, quedando atrapado entre proyectos para reemplazarlo por completo como el de Texcoco (ya descartado) y el de complementarlo, como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, uno de los símbolos de la gestión aeronáutica del presidente mexicano López Obrador, a su vez empañada por la pérdida de la Categoría 1 por parte de la Federal Aviation Administration de Estados Unidos (cuestión que IATA considera debe ser prioritaria)
«El potencial de México es enorme, con una abundancia de destinos turísticos, donde
la misión conjunta debe ser llevar este medio de transporte esencial a todos sus rincones para seguir haciendo más accesibles los viajes aéreos», señalan desde IATA, detallando que en ese país en 2021 el transporte aéreo era responsable de la generación de 1,3 millones de empleos, contribuyendo con USD 46.800 millones al PBI.
El populismo barato de López Obrador, tiene estos resultados
El AIFA es más chingon que el AICM que es viejo y obsoleto mejor salgo a tiempo que estar como pendejo arriba del avión hasta que te toque turno que los demás aeropuertos del mundo están todos en centro no verdad así no mamen