Aena, la concesionaria de aeropuertos españoles, anunció que llevará adelante una ampliación y refacción de la terminal del aeropuerto de Córdoba, Andalucía. Según la empresa, la obra permitirá duplicar la superficie del edificio actual y optimizar la dotación de medios en los diferentes sistemas.
El proyecto da continuidad a la modernización ya realizada en el terminal. Una vez adjudicada la licitación de la obra, el plazo para su ejecución será de aproximadamente un año. El monto total del concurso es de 2,3 millones de euros. La obra contempla la ejecución de una nueva construcción, que quedará adosada y comunicada al terminal actual por la fachada norte. El edificio resultante tendrá más de 1.000 metros cuadrados, por lo que se duplicará la superficie actual.
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La obra incluye los trabajos propios de una nueva edificación (estructura, arquitectura, instalaciones) y se desarrollará mediante una construcción modular, una opción innovadora que ofrece los mismos niveles de calidad que la construcción tradicional. Por otra parte, esta técnica reduce tanto los plazos de ejecución como el impacto ambiental, ya que la generación de residuos es significativamente menor.
Los trabajos de refacción también se realizarán en las principales áreas funcionales. Tanto la sala de embarque como la de recolección de equipaje dispondrán de más de 350 metros cuadrados. El vestíbulo de salidas, por su lado, alcanzará los 100 metros cuadrados. Así, Aena busca responder al creciente interés de las aerolíneas por operar en Córdoba.
También se buscará optimizar la dotación de medios en las diferentes áreas del aeropuerto. Así, entre otras mejoras, se incorporará un nuevo mostrador de facturación (pasará a tener tres) y un equipo de rayos X adicional (tendrá dos) en el control de seguridad. También se instalarán dos lectoras automáticas de tarjetas de embarque.
El proyecto de ampliación contempla, además, la mejora de todas las fachadas, la renovación de las aceras y la habilitación de accesos viales.
Un aeropuerto absurdo y mínimo : sin vuelos regulares y con apenas movimiento.
Ganas de tirar el dinero.
Hace 63 años que el Aeropuerto Municipal de Córdoba tuvo que entregar gratis la llave de propiedad al Ministerio del Aire. Desde entonces las inversiones han sido mínimas. Un auténtico chollo. Es evidente la vergüenza que han debido de pasar al comprobar que con la reciente puesta al día del equipamiento de el Terminal, no ha sido suficiente y han tenido que ordenar de urgencia la construcción de un módulo, literalmente pegado, a las diferentes salas en servicio (630 m2) las cuales totalizaran unos 1260 m2, que darán espacio para hacer la sala de la Policía Nacional encargada del control de las personas, además de las dependencias aduaneras (a demanda) de la Guardia Civil. El problema se evidenció con las recientes llegadas de múltiples jets privados que tuvieron que desviarse a Málaga o Sevilla, para hacer la entrada oficial en España y volver a Córdoba. Por cierto si alguien quiere café, no hay bar pero sí máquinas.
Tengo que añadir que siempre que han existido vuelos, los he usado. El próximo será el programado charter del 6 de diciembre, Córdoba – Praga y regreso, para el cual me cuidé de hacer las reservas con prontitud y que gracias a éso soy uno de los 189 privilegiados que la conseguimos antes de su ocupación total en menos de una semana. Eso sí, me lo tomaré a risa (que no a cachondeo) cuando nos presentemos todos juntos en el Terminal que, según AENA, ya está preparado para aviones de ¡hasta 100 pasajeros!, en una sala de embarque de 130 m2, a embarcar en un Boing 737-800 que, menos mal, irá con la mitad del combustible, que no de pasajeros.