Ryanair deberá recortar la programación de vuelos de su temporada de invierno debido a la demora en la entrega de nuevas aeronaves por parte de Boeing.
La medida fue anunciada este jueves por la ultra low-cost, detallando que tenían pactada la entrega de 27 aviones entre septiembre y diciembre, pero que como consecuencia de demoras en la producción de fuselajes en la planta de Spirit en Wichita en combinación con otras demoras en el centro de Seattle, ahora solo esperan recibir 14 nuevos aviones entre octubre y diciembre.
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En paralelo, Ryanair está trabajando con Boeing para acelerar las entregas entre enero y mayo de 2024 para llegar al pico de la temporada de verano 2024 con las 57 nuevas aeronaves que esperaban.
«Es muy lamentable que los problemas de producción en Wichita, y en Seattle, hayan vuelto a retrasar las entregas contratadas por Boeing a Ryanair este invierno», dijo Michael O’Leary, CEO de Ryanair.
«Mantenemos un diálogo regular con Boeing, y nuestro principal objetivo es garantizar la entrega de los 57 aviones 737 contratados antes de finales de mayo de 2024, para que la flota de Ryanair pueda crecer hasta más de 600 aviones para lo que será nuestro mayor programa de vuelos de verano», continuó, enfatizando que no esperan que el retraso en las entregas afecte sustancialmente el objetivo de llegar a a transportar 183,5 millones de pasajeros durante el año, aunque si estas se extienden al período de enero-marzo 2024, posiblemente deban ajustarlo ligeramente a la baja.
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Los ajustes de Ryanair
La ultra low-cost detalló que el retraso en la entrega de aeronaves por parte de Boeing provocarán la reducción de tres aeronaves basadas en Charleroi, dos en Dublín, y cinco en Italia (Bergamo, Napoles y Pisa), así como otras en east Midlands, Porto y Cologne.
Los pasajeros afectados recibirá un mensaje de Ryanair indicando opciones de reprogramación de sus vuelos o bien devolución del dinero.
