Vueling firmó un nuevo convenio colectivo con sus tripulantes de cabina, poniendo punto final así a meses de negociaciones en las que las huelgas fueron moneda corriente. El momento más álgido del conflicto fue cuando los trabajadores protagonizaron una huelga de tres meses entre noviembre de 2022 a enero de este año, reclamando mejoras salariales que la compañía en ese entonces había calificado de «imposibles de cumplir».
Ahora, el acuerdo firmado garantiza incrementos salariales tanto de 2022 como de 2023. También incluye un esquema de aumentos ligado a los resultados de la empresa y al incremento del IPC hasta 2025. Además toca diferentes aspectos como el régimen de contratación, de trabajo, descansos y vacaciones, entre otros. Desde la aerolínea subrayaron que el pacto permite dar continuidad al modelo de negocio de la compañía «a mediano y largo plazo».
Contenido relacionado: El paso de Vueling en Orly es la oportunidad de IAG de conquistar Francia
Para el 2022 se estableció un incremento salarial consolidado del 4,5% junto a un pago no consolidado del 0,8% del total del salario anual. También, se otorga una mejora de las condiciones laborales con un valor equivalente al 1,2% de la masa salarial. Para 2023, en tanto, se ha acordado un incremento consolidado del 3% que puede llegar al 4%. También se pagará un monto no consolidado de hasta el 1,5%. Para los años posteriores y hasta 2025, se establece un esquema de aumentos consolidados y no consolidados ligados a los resultados de la empresa y al incremento del IPC.
La falta de un acuerdo laboral con la plantilla había estado frenando las inversiones de IAG en Vueling. Al respecto, Luis Gallego, CEO de IAG, había indicado que cerrar un acuerdo era «crítico para determinar la inversión del grupo en la compañía en el futuro». El pacto con los tripulantes de cabina es un primer paso para intentar seguir el crecimiento de las otras aerolíneas del grupo. Vueling iniciará ahora conversaciones con el colectivo de pilotos.