Lufthansa remodelará en forma parcial la cabina de sus diecinueve Boeing 747-8. El principal problema radica en la distintiva cabina superior de la aeronave, que si bien hace que la misma sea el avión más icónico de la historia, genera problemas cuando se trata de instalar una nueva cabina.
Los Boeing 747-8 de Lufthansa están programados para recibir el concepto de cabina llamado Allegris, el nuevo producto intercontinental de la compañía, que fue presentado hace aproximadamente un año. Los planes actuales de la empresa, sin embargo, sugieren que inicialmente los 747-8 contarán con una cabina híbrida. Según información publicada por aeroTELEGRAPH, debido a la forma única de la cubierta superior -más estrecha que la principal- se deberán llevar a cabo adaptaciones especiales en los asientos. Esta tarea recaerá en Stelia Aerospace, una subsidiaria de Airbus.
Así las cosas, la flota de 747-8 de Lufthansa estará equipada con una cabina híbrida durante dos años. Inicialmente, solo la cubierta principal contará con la cabina Allegris. El primer paso implicará la introducción de una nueva clase ejecutiva, premium economy y economy. Sin embargo, primera clase, ubicada en la parte delantera inferior, permanecerá sin cambios por el momento.
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La cubierta superior, que cuenta exclusivamente con asientos de clase ejecutiva, no está programada para una actualización en esta etapa. La misma será renovada en forma conjunta con primera clase. Este problema tiene su génesis en el peso de los nuevos asientos y su compatibilidad con la estructura del fuselaje del 747-8.
Ya que los nuevos asientos de first y business son notablemente más pesados que sus predecesores, el centro de gravedad de la aeronave se podría desplazar, causando un exceso de peso en el morro. Para contrarrestar esto, solo para la primera etapa de la modernización se necesitará agregar 700 kilogramos adicionales de peso en la parte trasera de la aeronave, ya sea instalando una placa o un tanque de agua. Con la renovación completa, este problema podría incluso resultar en la imposibilidad de transportar carga en la sección delantera.
Estos desafíos podrían requerir un aumento significativo en el presupuesto para las actualizaciones de la cabina del 747-8. Lufthansa declaró que aún no ha tomado ninguna decisión sobre la continuidad del programa de modernización de sus 747-8.
