Accidente del Boeing 737 MAX 9 de Alaska: el informe preliminar indica que Boeing había retirado los pernos de la puerta

Boeing 737-9 MAX

La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (National Transportation Safety Board-  NTSB) divulgó en su informe preliminar que el incidente del Vuelo 1282 de Alaska Airlines el 5 de enero se debió a cuatro pernos faltantes de un tapón de puerta del fuselaje cuando Boeing entregó la aeronave.

Un Boeing 737 MAX de Alaska Airlines pierde una puerta de emergencia en pleno vuelo: Esto sabemos

Los pernos faltantes, esenciales para asegurar el tapón de la puerta de salida identificada como MED (Mid Exit Door) estaban ausentes antes del incidente, revelando una falla en el proceso de ensamblaje en la fábrica de Renton de Boeing. La NTSB destacó que el tapón de la puerta fue inicialmente removido por un equipo de Spirit AeroSystems para corregir remaches dañados.

Posteriormente, un equipo de Boeing fue responsable de reinstalar la pieza del fuselaje: sin embargo, a un mes del incidente, Boeing aún no le entregó a la NTSB documentación detallada sobre los procedimientos seguidos para la reapertura y cierre del tapón de la puerta, incluyendo los detalles del flujo de autorización y control del trabajo realizado. Este descuido permite evidenciar una brecha importante y peligrosa en los procesos de control de calidad del fabricante. 

El tapón de la puerta, un panel utilizado en lugar de una puerta real para salidas de emergencia opcionales en algunos aviones, está diseñado para ser asegurado por 12 almohadillas de parada de metal. La ausencia de los cuatro pernos críticos permitió que el tapón se desplazara hacia arriba, llevando a la descompresión explosiva experimentada por los pasajeros.

Descompresión del Boeing 737 MAX -9: La Investigación de la NTSB podría llevar hasta 18 Meses

En respuesta al incidente, Boeing ha tomado medidas para mejorar sus medidas de aseguramiento de calidad, incluyendo inspecciones adicionales en sus fábricas de Renton y Wichita, invitando a las aerolíneas a inspeccionar los aviones durante el ensamblaje, y realizando una auditoría independiente de sus sistemas de gestión de calidad.

La FAA también ha tomado medidas al poner en tierra los MAX 9 para inspecciones, investigando la adherencia de Boeing a los sistemas de calidad, y posponiendo cualquier aumento en las tasas de producción del MAX hasta estar satisfecha con los controles de calidad mejorados.

La palabra de Boeing

En un comunicado, el fabricante indica que «Boeing agradece el trabajo de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE.UU. y revisará sus conclusiones con celeridad. Seguiremos cooperando plena y transparentemente con las investigaciones de la NTSB y de la FAA».

El Presidente y Consejero Delegado de Boeing, Dave Calhoun, declaró: «Sean cuales sean las conclusiones finales, Boeing es responsable de lo ocurrido. Un suceso como éste no debe ocurrir en un avión que salga de nuestra fábrica. Simplemente debemos hacerlo mejor para nuestros clientes y sus pasajeros. Estamos aplicando un plan integral para reforzar la calidad y la confianza de nuestras partes interesadas. Harán falta acciones importantes y visibles, así como mantener la transparencia en todo momento, y ahí es donde estamos enfocados de lleno.»

Boeing dice que «está tomando medidas inmediatas para reforzar la calidad»: la empresa ha puesto en marcha un plan de control para garantizar que todos los tapones de las puertas de salida central de los 737-9 se instalan de acuerdo con las especificaciones.

Además, se han instituido nuevas inspecciones del ensamblaje del tapón de la puerta y estructuras similares en la fábrica de nuestro proveedor y en la línea de producción de Boeing.

Según la compañía, «se ha añadido señalización y un protocolo para documentar plenamente cuándo se abre o se retira el tapón de la puerta en la fábrica, garantizando que se vuelva a instalar e inspeccionar antes de la entrega.»

Además, Boeing está aplicando planes para mejorar la calidad y la estabilidad generales en todo el sistema de producción del 737, entre los que se incluyen:

  • Realización de inspecciones adicionales en la cadena de suministro y colaboración con los proveedores para mejorar la producción.
  • Dedicar varios días a nuestros equipos de 737 para centrarse en las mejoras de calidad y aplicarlas.
  • Puesta en marcha de una evaluación independiente para reforzar el sistema de gestión de la calidad en Boeing Commercial Airplanes por parte de un experto en seguridad de gran experiencia.

Además de estas acciones, dice Calhoun, «estamos abriendo nuestra fábrica a los clientes del 737 para que lleven a cabo sus propias revisiones adicionales, y apoyaremos de forma plena y transparente las acciones de investigación, auditoría y supervisión de la FAA.»

«Este mayor escrutinio -de nosotros mismos, de nuestro regulador y de nuestros clientes- nos hará mejores. Es así de sencillo«, cerró el CEO.

Deja un comentario