Guerra de las Galaxias reeditada? EE.UU. alerta que Rusia planea desplegar armas nucleares en el espacio, el Kremlin lo niega

Gastón Dubois

Armas nucleares en el espacio?

Estados Unidos advirtió a sus aliados que Rusia tiene pensado desplegar un satélite armado con una cabeza nuclear para finales de año, pero desde Moscú lo niegan enfáticamente.

Los servicios de inteligencia norteamericanos piensan que Rusia está cerca de desplegar un arma nuclear en el espacio, o una ojiva simulada para pruebas, lo cual violaría el Tratado sobre el Espacio Ultraterrestre firmado y ratificado por 110 (entre los cuales se cuenta Rusia y el resto de las potencias nucleares).

Según palabras del propio presidente Joe Biden, la cabeza nuclear sería una parte esencial de un arma espacial diseñada para la destrucción de satélites enemigos. También agrego que esta supuesta arma, no representa una amenaza directa para la vida de las personas. Se trataría en cambio, según los analistas, de una velada amenaza de Putin, para que no lo presionen en exceso respecto de sus pretensiones sobre Ucrania u otras zonas de interés estratégico ruso, porque podría dañar seriamente la economía mundial, sin que ello signifique atacar directamente a ningún ser humano.

Y si explota por error?

Según fuentes consultadas por Bloomberg, los organismos de inteligencia norteamericanos no consideran que Moscú planee detonar ningún arma orbital en el corto y mediano plazo. Sin embargo, advierten que una explosión accidental podría ser suficientemente peligrosa como para afectar hasta un tercio de los satélites en órbita, causando estragos en los sistemas de comunicaciones.

Dependiendo del tamaño de la ojiva, una detonación podría acarrear la destrucción de varios satélites, o tan solo forzarlos fuera de su órbita establecida, requiriendo su corrección. La Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Ultraterrestre da cuenta de casi 7.800 satélites operativos en la órbita terrestres.

Estados Unidos y sus aliados estarían tratando de disuadir a Rusia de desplegar esta capacidad, particularmente a través de la diplomacia China e India, ya que consideran que Moscú sería más permeable a sus influencias.

Según las agencias de inteligencia occidentales, Rusia viene conduciendo lanzamientos secretos de satélites militares desde principios del 2022, los cuales son sospechados de estar relacionados con esta hipotética arma nuclear orbital.

La negativa oficial rusa

El Ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, salió al cruce de las acusaciones lanzadas por los EE.UU.

Ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú

«No tenemos ningún despliegue de armas nucleares en el espacio ni el uso de ningún otro elemento de armas nucleares en satélites, ni la creación de campos que no permitan que los satélites funcionen eficazmente. No tenemos esto, y ellos saben que No lo tenemos, pero aun así hacen ruido”, afirmó Shoigú durante una reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin.

Guerra de las Galaxias reeditada

Esta situación recuerda a la otrora Iniciativa de Defensa Estratégica (IDE), apodada como el «programa de la Guerra de las Galaxias». El concepto fue anunciado el 23 de marzo de 1983 por el Presidente Ronald Reagan como un complejo  sistema de defensa antimisiles, con base en el espacio, para proteger a Estados Unidos de los ataques con armas nucleares estratégicas balísticas soviéticas. Reagan pidió a los científicos e ingenieros estadounidenses que desarrollaran un sistema que dejara obsoletas las armas nucleares.

Logo de la Iniciativa de Defensa Estratégica (IDE)

Se estudió un amplio abanico de conceptos de armamento avanzado, incluidos láseres, armas de haces de partículas y sistemas de misiles terrestres y espaciales, junto con diversos sistemas de sensores, mando y control, y sistemas informáticos de alto rendimiento que serían necesarios para controlar un sistema formado por cientos de centros de combate y satélites que abarcarían todo el planeta y participarían en una batalla muy corta.

Así se imaginaban en los 80 que sería el proyecto «Guerra de las Galaxias» una vez implementado.

Finalmente, por costos y dificultades técnicas, el programa de la “Guerra de las Galaxias” se fue abandonando paulatinamente. Existe la creencia popular de que en realidad se trató todo de una operación teatral armada por los organismos de inteligencia norteamericanos para forzar a la Unión Soviética a gastar ingentes recursos (que no le sobraban) en contrarrestar una amenaza que no existía. Con el tiempo, esta historia terminó integrándose al variopinto folklore de la Guerra Fría.

Satélite armado con misiles nucleares norteamericano «Hercules», construido en secreto para eludir las prohibiciones de la no militarización del espacio. Imagen extracto de la película «Meteor» de 1979.

El dominio espacial como teatro operacional

Sin embargo, ya desde los años 60, tanto la OTAN como la URSS tuvieron clara la importancia que asume el espacio exoatmosférico para la realización de operaciones militares en la superficie del globo, pero que también como campo de batalla por derecho propio. El Dominio Espacial fue ganando relevancia creciente con el pasar de los años gracias al advenimiento de la era de las comunicaciones digitales, el ingreso de nuevos actores estatales en la producción y lanzamiento de satélites, así como la irrupción de las empresas privadas en la industria espacial, con el consiguiente abaratamiento de dicho mercado y el aumento de entidades (públicas o privadas) que pudieron poner sus propios ingenios espaciales en órbita.

Logo del Comando Espacial de Estados Unidos.

La actual dependencia de las economías y de los Estados (pensemos la importancia del guiado por GPS/GLONASS/Galileo/BeiDou para la guerra actual) de la red de satélites, condujo a que en épocas recientes, se crearan de mandos militares específicos al dominio espacial, como es el caso del Comando Espacial norteamericano o del Reino Unido. Otra opción elegida fue la de extender el área de incumbencia de las Fuerzas Aéreas hacia la órbita terrestre, como lo hicieron Francia, España, entre muchos otros. En este sentido, Rusia fue pionera en reconocer el espacio orbital como un dominio militar de legitimidad propia, y en el 2015 creó las  Fuerzas Aeroespaciales de la Federación Rusa (VKS), al fusionar la Fuerza Aérea y las Fuerzas de Defensa Aeroespacial, esta última siendo creada en el 2001 para continuar con las operaciones militares en el espacio que antes eran llevadas a cabo por organismos de la extinta URSS.

A modo de reflexión

Independientemente de si las acusaciones norteamericanas son fundadas o no, o de si la supuesta arma orbital antisatélite rusa porta o no una cabeza nuclear, lo cierto es que las grandes potencias militares y económicas reconocieron el valor estratégico que tiene el dominio espacial, y están actuando en consecuencia. No nos debe extrañar que generen medios de acción o disuasión orbitales, ya que responde a sus interesas actuales y futuros, y está dentro del alcance técnico de actores como EE.UU., Rusia, China, Reino Unido, Israel, Francia, y tal vez la India.

Todo parece indicar que estamos ante una “nueva” carrera armamentística cuyo campo de batalla será el espacio. No importa si es Rusia la primera potencia en violar el Tratado sobre el Espacio Ultraterrestre mediante el despliegue de dicha nueva capacidad orbital, o si es Estados Unidos o China, lo cierto es que los demás lo seguirán. Y en todo caso, la militarización del espacio estuvo presente desde los inicios de la carrera espacial, nunca se detuvo, y ahora está entrando en una nueva y vigorosa etapa, gracias a los adelantes tecnológicos que la hacen más accesible y segura.

Para finalizar, quiero dejarles una escena de la hilarante película Iron Sky, sobre la potencial anulación del Tratado sobre el Espacio Ultraterrestre. Casi diría que el sentido de esta nota, es poner esta escena.

La comedia expone y adelante muchas verdades.

Deja un comentario