Ante problemas operativos que provocan múltiples cancelaciones y demoras, Flybondi ha contratado nuevamente a Andes Líneas Aéreas en modalidad wet-lease para cubrir vuelos nacionales.
Este acuerdo ya había sido utilizado durante la pasada temporada de verano, cuando Flybondi enfrentó problemas similares con su flota.
La low cost continúa sufriendo las consecuencias de restricciones para acceder a divisas y otras trabas gubernamentales, lo que dificulta el pago a centros de mantenimiento (MRO) y la adquisición de repuestos para sus Boeing 737-800.
Actualmente, Flybondi posee una flota de 15 Boeing 737-800, pero tres de ellos (LV-KGN, LV-KAY, y LV-KEG) se encuentran en mantenimiento programado en Ciudad de México, mientras que otro (LV-KCD) está en el aeropuerto de Ezeiza. Además, otras aeronaves quedaron temporalmente fuera de servicio el pasado fin de semana, aunque la mayoría ya ha vuelto a volar, salvo los registros LV-KCE y LV–KEH, según Flightradar24.
Con solo nueve aviones en operación, Flybondi está cubriendo tanto tres destinos internacionales como diecinueve nacionales, pero con frecuencias reducidas. Dado que la aerolínea opera con un índice de ocupación del 90%, miles de pasajeros han visto sus vuelos reprogramados o directamente cancelados.
Para evitar más complicaciones, Andes, utilizando a su Boeing 737 con registro LV-KFW, cubrió dos rotaciones entre Buenos Aires y Bariloche. Sin embargo, Andes tiene una disponibilidad limitada debido a sus vuelos chárter programados para estudiantes, lo que complica su capacidad para ayudar a Flybondi a cubrir toda la demanda.
¿Flybondi busca ayuda a aerolíneas extranjeras?
Durante el vuelo inaugural de San Juan, Federico Pastori, Chief Commercial Officer (CCO) de Flybondi, había manifestado que “Hay un plan de normalizar la flota y seguimos trabajando en normalizar el servicio.” Por el momento se mantendrán durante este año con 15 aviones y planean llegar a 20 en 2025.
Pastori adelantó que Flybondi está evaluando la posibilidad de contratar aerolíneas y tripulación extranjera (wet-leasing) para la próxima temporada de verano. Esto sería posible gracias a los recientes cambios en las Regulaciones Argentinas de Aviación Civil (RAAC), lo que permitiría mitigar futuros inconvenientes operativos.
“Se evalúan varios proveedores: España, Lituania… no estamos cerrados a ninguna opción. Ni siquiera a un modelo de flota o a un tamaño de avión. La ecuación es simple: si hay demanda, hay avión, y hay tripulación, lo hacemos. Hoy nos es más fácil construir sobre lo que tenemos, los 737. Pero Argentina te obliga a repensar tu estrategia todo el tiempo.”, había agregado Pastori.
