El jueves 12 pasado, el Sindicato de Trabajadores de Nuevo Pudahuel, concesionaria del Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez de Santiago de Chile, inició un paro que se extendió hasta la tarde del mismo día en donde, gracias a la mediación de la Dirección del Trabajo de aquel país, se llegó a un acuerdo con la concesionaria dependiente de Vinci Airports.
El paro fue decidido a la votación del sindicato en contra de la propuesta de negociación colectiva que se debatía entre trabajadores y Nuevo Pudahuel, además de solicitar un reajuste de salarios mensuales y el bono de alimentación que alcanzaba los USD 5, siendo que el Aeropuerto es uno de los lugares donde más costoso se hace comprar alimentos. La propuesta del Sindicato consideraba un incremento de al menos USD 10 por este concepto.
“En 9 años no se modificó el bono de alimentos…”, decía el presidente del sindicato, Juan Prado, justificando, entre otros, el porqué de la medida sindical y teniendo en consideración la proximidad de las festividades patrias de Chile, en donde se pronostica un incremento de un 25% en la cantidad de pasajeros volando desde Santiago.
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Si bien el paro comenzó alrededor de las 7 de la mañana del jueves 12, en donde trabajadores se manifestaban de forma pacífica con sirenas y pancartas, entre otros, no hubo mayor alteración al funcionamiento de los vuelos en un día normal (no festivo).
En conversación con Radio Cooperativa, un funcionario de comunicaciones de Nuevo Pudahuel informaba que «se estableció un plan de contingencia que se basa en servicios mínimos. Como nosotros prestamos servicios críticos, la ley establece que tenemos que cumplir servicios mínimos con el sindicato, definidos con ellos». Además, llamaban al pasajero a llegar con al menos 3 horas de anticipación en vuelos nacionales y 4 en los de internacionales.
Ya en horas de la tarde y mediante la intervención de la Dirección del Trabajo en Chile, tanto el sindicato como la concesionaria suscribieron un nuevo convenio colectivo que incorpora beneficio a los trabajadores y un impulso a futuro. Con esto, todos los trabajadores depusieron el paro, lo cual fue destacado por la ministra de Obras Públicas, Jessica López, tanto por la voluntad como por la forma pacífica de la manifestación.
Así entonces, las Fiestas Patrias en Chile toman vuelo sin riesgo, al menos, en los trabajadores de la concesión.
