El Gobierno Nacional ha emitido el Decreto 941/2024, que introduce modificaciones clave al Código Aeronáutico de Argentina (Ley N° 17.285) en respuesta a los hallazgos aún no resueltos de las auditorías internacionales, que señalaron deficiencias severas en el cumplimiento de los estándares de seguridad aérea.
La decisión responde a los resultados de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos, que detectaron niveles insuficientes de cumplimiento en varias áreas críticas, y que podrían llevar a que el país pierda la Categoría I del Programa IASA (International Aviation Safety Audit).
Uno de los cambios más importantes es el refuerzo de las competencias de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que a partir de ahora tendrá la facultad de dictar y regular las normas de seguridad operacional en el sector de la aviación civil. ANAC también podrá delegar en entidades externas las funciones de certificación médica, aeronavegabilidad y otras áreas clave, siempre garantizando el cumplimiento de las normativas internacionales. Esto permitirá a la autoridad aeronáutica optimizar la fiscalización y el control de las operaciones aeronáuticas.
El nuevo decreto también establece que la ANAC podrá practicar verificaciones exhaustivas a personas, aeronaves y tripulaciones antes, durante y después del vuelo, con el objetivo de garantizar la seguridad operacional. En caso de que se detecten irregularidades, la autoridad podrá impedir el vuelo de aeronaves que no cumplan con los requisitos legales o reglamentarios, así como retener licencias del personal que no siga los procedimientos establecidos.
Otra novedad importante es la posibilidad de que la ANAC pueda delegar en personas o entidades privadas algunas de sus funciones, como la certificación y fiscalización de aeródromos, servicios aeroportuarios y navegación aérea. Esta medida, conseguida a través de la eliminación del artículo 108, pretende agilizar los procesos y garantizar que se cumplan con los estrictos estándares internacionales en cuanto a seguridad y control.
En cuanto al régimen sancionatorio, el decreto actualiza el sistema de multas y penalidades para quienes infrinjan las normas del Código Aeronáutico. Las sanciones incluyen desde apercibimientos hasta multas económicas, inhabilitaciones temporales o definitivas, y la suspensión o retiro de autorizaciones para la explotación de servicios aerocomerciales. Dependiendo de la gravedad de la infracción, las multas pueden llegar hasta 300 Argentinos Oro (cerca de 190.000 dólares), una medida que busca ser un fuerte disuasivo frente a cualquier incumplimiento.
El Decreto 941/2024, que entra en vigor inmediatamente tras su publicación en el Boletín Oficial, subraya la urgencia de estas modificaciones debido a los pobres resultados obtenidos en las auditorías internacionales de 2022 y 2024. En ambas evaluaciones, Argentina obtuvo puntuaciones por debajo del promedio mundial, especialmente en áreas críticas como la organización de la aviación civil y las operaciones de aeronaves. La falta de avances en la corrección de estos hallazgos obligó al Poder Ejecutivo a intervenir rápidamente para evitar un deterioro mayor en los estándares de seguridad aérea del país.
