El Grupo LATAM anunció la compra de diez Boeing 787 Dreamliner, con opción para cinco adicionales, fortaleciendo su posición como el mayor operador de este modelo en América Latina. La compañía proyecta aumentar su flota a 52 unidades para 2030, enfocado en la variante 787-9 para vuelos de larga distancia. Actualmente, LATAM opera con diez 787-8 y veintisiete 787-9, también posee pedidos por otros nueve Dreamliner con entrega entre 2025 y 2027.
“El Boeing 787 es un avión mucho más eficiente, que nos permite seguir creciendo de manera sustentable y reducir nuestra huella de carbono a medida que impulsamos el crecimiento de nuestras operaciones. Este pedido nos permitirá recibir al menos dos aviones de este modelo cada año desde 2025 hasta el final de la década”, comentó Ramiro Alfonsín, Chief Financial Officer de LATAM Airlines Group.
Según Boeing, la familia 787 ofrece una eficiencia de combustible que reduce el consumo y las emisiones en un 25 % comparado con los aviones que reemplaza. La variante 787-9, que puede transportar más pasajeros y carga, es ideal para las rutas de mayor distancia en la red de LATAM.
Actualmente, el 41,9 % de los vuelos operados por 787 Dreamliners de LATAM parten de Santiago (SCL), seguidos de São Paulo/Guarulhos (GRU) con el 24 %, y Lima (LIM) con el 5,5 %, según datos de la plataforma Cirium.
El adiós de los Boeing 767 de pasajeros de LATAM
El nuevo pedido la modernizará la flota de LATAM, reemplazando los nueve Boeing 767-300 (ER) que operan principalmente desde Lima. La falta de aviones de fuselaje ancho ha limitado la capacidad de LATAM para abrir nuevas rutas, afectando su ruta entre Bogotá y Madrid, inaugurado a mediados de año. Además de potenciar sus rutas existentes en Brasil y continuar ampliando su red de destinos de larga distancia.
Este pedido se complementará con la futura entrega de los A321XLR, previstos para 2026, que cubrirán rutas actualmente operadas por Boeing 767 y 787, lo que permitirá que estos últimos se reorienten hacia servicios de mayor alcance.
Felicitaciones por esta nueva adquisición de 10 787-9. Ojalá que también renueven los 320 y 321
por NEO. Que al llegar operen en Chile y no en Brasil como esta ocurriendo con los 320 Neo y 321
Neo adquiridos los dos últimos años, destinados exclusivamente para el país carioca.