El retraso en la liberación de carga en el aeropuerto de Guarulhos, que ya se venía produciendo desde hace un tiempo y se intensificó en octubre, provocó una acumulación que obliga a suspender la recepción hasta el lunes.
El asunto fue llevado a los tribunales por muchos danmificados, con el objetivo de que la carga sea liberada dentro del plazo preestablecido, informó Aeroin.
Por lo que, para que el problema no sea aún mayor, el Aeropuerto GRU decidió ayer que ya no recibirá carga internacional, al menos hasta el lunes 11 de noviembre.
Liberar espacio
El plan es liberar el espacio actual y avanzar con las cargas retrasadas, que según la concesionaria, están fuera del plazo de liberación debido a un volumen de recepción «anormal».
El año pasado, coincidiendo con las vacaciones de fin de año, la carga permaneció en el patio hasta 30 días a la espera de ser liberada.
El tribunal de São Paulo ya determinó que el aeropuerto GRU no cobre tarifas de almacenamiento por el período de retraso, y la concesionaria dijo que contrató más empleados y ampliará el espacio de almacenamiento para solucionar el problema.
Existen excepciones a esta prohibición hasta el día 11, y se trata de carga perecedera, productos farmacéuticos y material para aerolíneas, como motores y repuestos de aviones.