El diputado provincial Joaquín Blanco ha impulsado un proyecto de ley en la Cámara de Diputados de Santa Fe para reactivar la Refinería San Lorenzo de YPF, transformándola en una planta de combustibles sostenibles de aviación (SAF por su sigla en inglés). Esta iniciativa busca aprovechar el espacio inactivo y producir combustibles sostenibles que permitan reducir las emisiones de la industria aeronáutica.
Según informó el medio local Rosario3, Blanco destacó la importancia de esta reconversión para la región: «Recuperar este lugar que hace seis años está abandonado es clave para impulsar desde lo local el desarrollo nacional».
El SAF es considerado como una de las pocas alternativas viables para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en la aviación, con un potencial de disminución de entre el 50% y 60%.
El legislador subrayó que «Santa Fe es pionera en la generación de biocombustibles» y considera que esta reconversión sería una oportunidad única para posicionar a la provincia como líder en sostenibilidad dentro del sector aeronáutico.
La refinería data de 1938 y fue adquirida por YPF en 2018 cuando ya llevaba varios años inactiva, y de acuerdo al diputado necesitaría una inversión de 300 millones de dólares para adaptarse a las nuevas necesidades tecnológicas de producción de SAF.
Blanco explicó que el proyecto de ley también pretende atraer inversores nacionales e internacionales, proporcionando un marco jurídico estable para este tipo de inversión a largo plazo. Como señaló Rosario3, el bloque socialista respaldó plenamente esta iniciativa, subrayando la necesidad de garantizar seguridad jurídica y estabilidad para los futuros inversores.
Actualmente, la producción mundial de estos biocombustibles representa apenas el 0,1% del total de combustibles utilizados en la aviación, aunque la demanda está en rápido crecimiento, con proyecciones de triplicarse para 2025.
El diputado concluyó que este proyecto podría transformar la economía local, generar empleo de calidad y facilitar la transición hacia energías renovables en la provincia, impulsando «la inversión en infraestructura y el crecimiento económico local» en el marco de políticas públicas sostenibles.
A pesar del optimismo de la propuesta, no son pocos los desafíos detrás de la producción de combustible sostenible, y una transición hacia energías renovables requiere de una aproximación multidimensional que excede por mucho la reactivación de una refinería inactiva.
Teniendo en cuenta la cantidad de proyectos iniciados en la región en los últimos años, el hecho de que ningún inversor haya decidido utilizar las instalaciones de la refinería pone de manifiesto las dificultades inherentes a la reactivación y transición a la producción de SAF.
La logística de abastecimiento de una petrolera tradicional y una compañía que produce combustible basado en feedlots no siempre es compatible, y el costo de adaptar dicha producción no es menor, en un mercado en el que el precio será un factor determinante para la competitividad del proveedor y de la aerolínea que lo utilice.
Otra cuestión a considerar es qué tipo de SAF se producirá, porque los estándares de los mercados europeos y americanos son diferentes, y la decisión de producir para uno u otro estándar modificará procesos, tecnología y formación. Además, la mayoría de las aerolíneas encaró programas de abastecimiento con refinerías ya establecidas o con proyectos que inician con la producción precomprada.
Por tanto, encontrar clientes no es tan simple, y aquel que quiera incorporarse al complejo mercado del combustible sostenible deberá tener resueltas estas cuestiones si quiere prometer viabilidad de largo plazo a la monumental inversión necesaria para hacerla realidad.
