El gobierno de los Estados Unidos está considerando imponer nuevas restricciones de viaje a ciudadanos de más de 40 países, según un memorando interno accedido por Reuters y fuentes vinculadas al proceso.

Las naciones mencionadas en el documento están divididas en tres categorías, cada una sujeta a distintos niveles de limitación.

El primer grupo, compuesto por diez países, entre ellos Afganistán, Irán, Siria, Cuba, Venezuela y Corea del Norte, estaría sujeto a una suspensión total en la emisión de visas para ingresar a EE.UU.

En el segundo grupo, que incluye Eritrea, Haití, Laos, Myanmar y Sudán del Sur, la restricción afectaría categorías específicas de visas, impactando a turistas, estudiantes y ciertos tipos de inmigración.

El tercer conjunto, formado por 26 países, como Bielorrusia, Pakistán y Turkmenistán, tendría un plazo de 60 días para reforzar sus procedimientos de control y selección de información. En caso de no cumplir con los requisitos, podrían enfrentar restricciones parciales en la emisión de visas.

La administración del presidente Donald Trump ha defendido medidas más estrictas para la verificación de extranjeros que ingresan al país, citando preocupaciones de seguridad nacional. Como parte de esta iniciativa, se solicitó la elaboración de una lista de países cuyas deficiencias en los procedimientos de control justificarían la adopción de restricciones migratorias.

Un representante del gobierno, que pidió anonimato, afirmó que la lista aún está sujeta a revisiones. Además, cualquier medida definitiva requerirá la aprobación del gobierno estadounidense y del secretario de Estado, Marco Rubio.

Si se implementan, las nuevas restricciones podrían impactar directamente en el sector de la aviación, afectando a las compañías que operan vuelos hacia las regiones involucradas y generando posibles pérdidas financieras, además de dificultar el desplazamiento internacional de pasajeros provenientes de estos países.