"Innovación es pensar a quince años": Entrevista con Martín Beitía, Jefe de Innovación, Diseño e Investigación de Iberia
Iberia presentó en su Espacio Iberia en Buenos Aires su nuevo Hub de Innovación, una plataforma diseñada para centralizar y visibilizar su apuesta por la tecnología, la sostenibilidad y la mejora de la experiencia del cliente. Inspirado en los grandes hubs aéreos, busca ser un punto de conexión para ideas, talento y tecnología, integrando proyectos internos y colaboraciones externas.
El Hub, que operará bajo atributos clave como "conectado, copilotado, ciberseguro, sostenible, colectivo y personalizado", estrena también una plataforma web donde startups y colaboradores pueden explorar casos de éxito y proponer nuevas soluciones. Esta iniciativa consolida más de una década de trabajo en transformación dentro de la aerolínea.
Para comprender la magnitud de esta iniciativa, sus objetivos y los retos tecnológicos que enfrenta la compañía, conversamos en profundidad con Martín Beitia, Responsable de Innovación, Diseño e Investigación de Iberia. En una charla súper amena, recorrimos con Martín el camino de la búsqueda de talento en esta región, y cómo abordan con visión de futuro la incorporación de nuevas tecnologías, desde la IA hasta el enorme desafío de la descarbonización.
Pablo Díaz: Martín, gracias por recibirnos. Iberia lanza este Hub de Innovación. ¿Nace de una necesidad específica o responde a un propósito más estratégico de organizar la innovación que ya venían haciendo?
Martín Beitia: Gracias a vosotros. Diría que no surge tanto de la necesidad, sino más bien desde el propósito de capitalizar y aglutinar todos los esfuerzos de innovación que Iberia y el grupo IAG ya venían realizando. Iberia tiene un equipo formal de innovación desde hace casi 10 años, trabajando en múltiples iniciativas. Históricamente, nuestro principal vehículo a nivel grupo era Hangar 51, la aceleradora por donde pasaron más de 100 startups, y un fondo de capital de riesgo.
Ambos se han transformado ahora en lo que llamamos IAG Innovation, que tiene una estructura con dos tracks claros: 'Discover', para startups más early-stage enfocadas en Deep Tech –aquí hablamos de nuevos combustibles (SAF), captura de carbono, reducción de plásticos– con un acompañamiento de 6 meses; y 'Deploy', para soluciones ya en fase comercial que buscamos integrar rápidamente en las operaciones del grupo.
Además de esto, en los últimos años creamos All4Zero, una alianza potente con empresas como Repsol, ArcelorMittal, Holcim, Airbus o Sacyr, enfocada en el reto compartido de la descarbonización industrial. Y también lanzamos Patio Campus, un hub físico de innovación corporativa en Madrid junto a Inditex, BMW, L'Oréal y otras.
Entonces, con todos estos vehículos funcionando, sentimos que era el momento de darles una coherencia, centralizarlos bajo un mismo paraguas –nuestro nuevo Hub de Innovación Iberia– para generar sinergias y tener una presencia más unificada y potente hacia el mercado.
Además de las colaboraciones mencionadas por Beitía, Iberia también destaca trabajos con startups como Technis, que utiliza vídeo analítica para optimizar operaciones en salas Premium, y Beder, definida como una mezcla de TikTok y Tripadvisor para conectar con viajeros jóvenes.
Entre los desarrollos internos destacados por Iberia se encuentran la integración con AirTags de Apple para seguimiento de equipaje, la nueva área personal Mi Iberia para autogestión, el sistema OPACA (Proactive Automated Customer Assistance) para gestionar disrupciones, la potenciación de la Omnicanalidad (incluyendo check-in vía Whatsapp), y programas de fidelización y servicio como AVIOS Solidarios y Maridae (selección de vinos a bordo).

P: Tiene mucho valor que el anuncio se haga aquí en Buenos Aires y no en Madrid. ¿Qué mensaje buscan transmitir con esta decisión?
Martín Beitia: Totalmente: ha sido una decisión muy consciente, y es una declaración de intenciones. Queremos que sea un paso más para estrechar lazos con Latinoamérica, encontrar sinergias y oportunidades aquí. Iberia es la aerolínea europea con alma latina, somos el puente natural entre ambas regiones, y eso debe reflejarse también en nuestra estrategia de innovación.
Sentimos que, a pesar del enorme talento que hay en Latinoamérica, y especialmente en Argentina, la representación de startups de la región en nuestros programas anteriores ha sido baja, quizás dos o tres de cien. Eso no es representativo ni del talento local ni del volumen de negocio que Latinoamérica supone para Iberia, que es nuestro mercado más relevante.
No buscamos tanto talento para incorporar directamente a nuestros equipos centrales, que mayoritariamente están en Madrid desarrollando la tecnología, sino conectar profundamente con el ecosistema innovador: emprendedores, startups, ideas. Hemos tenido experiencias fantásticas colaborando con talento argentino, como con Globant, que es un partner clave, o con Háblalo de Mateo Salvatto. Queremos institucionalizar esa conexión, ir un paso más allá y tener más relevancia aquí.
P: ¿Qué tipo de startups o proyectos buscan específicamente? ¿Cuáles son las áreas tecnológicas prioritarias para Iberia en los próximos años?
Martín Beitia: Hemos definido una tesis de innovación con focos claros. Primero, todo lo relacionado con Inteligencia Artificial y agentes sintéticos: cómo van a impactar nuestra operación, la toma de decisiones, la interacción con clientes. Segundo, la automatización de procesos críticos, especialmente en el entorno aeroportuario. Tercero, y fundamental, la sostenibilidad, con un gran énfasis en nuevos combustibles (SAF) para avanzar hacia una aviación descarbonizada.
Cuarto, plataformas experienciales, que engloba desde la distribución y el e-commerce hasta cómo interactuamos en redes y nuevos entornos digitales. Quinto, conectividad e IoT, para tener una operación plenamente conectada. Y sexto, ciberseguridad, para trasladar la robustez de nuestra seguridad física al entorno digital. Dentro de estos ámbitos, buscamos startups con un buen producto, que tengan potencial de escalar y generar un impacto significativo en nuestro negocio –hablamos de millones de euros–.
El equipo fundador es crucial: buscamos una relación de confianza, un propósito alineado. No solo buscamos proveedores, sino "compañeros de viaje" con quienes podamos co-crear. Tenemos ejemplos como Smartvel, que pivotó durante la pandemia para ofrecer información de restricciones de viaje, algo vital en ese momento, o Renacen, con quienes empezamos virtualizando la flota y acabamos desarrollando NFTs y experiencias en el Metaverso.
P: Mencionaste NFTs y Metaverso. Hubo un gran 'hype' con estas tecnologías. ¿Cómo ve Iberia su utilidad real hoy y a futuro?
Martín Beitia: Sí, hubo un hype evidente. Creo que aún estamos encontrando los casos de uso óptimos. Para los NFTs, veo potencial en la gamificación, en enriquecer programas de loyalty y en la gestión de identidad digital a través de wallets. En cuanto al Metaverso, aunque quizás el concepto inicial se desinfló un poco, creo que evolucionará hacia utilidades concretas: entornos virtuales para explorar destinos antes de reservar, centros de atención al cliente más inmersivos, o, algo que me interesa mucho, el uso de Realidad Virtual, Aumentada o Mixta para formación y entrenamiento de nuestras tripulaciones y personal, áreas donde puede aportar un valor enorme. Quizás la Realidad Aumentada tenga una aplicación más inmediata y útil en ciertos procesos operativos que la virtual pura.
P: Hablando de experiencia del pasajero y operaciones, ¿cómo están cambiando los aeropuertos y cuál es el rol de la tecnología en esa transformación?
Martín Beitia: Estamos viendo una revolución, sobre todo con la digitalización de procesos de bajo valor añadido. Los quioscos de auto check-in o self bag-drop permiten una experiencia más autogestionada para el cliente y liberan a nuestros empleados para que se enfoquen en roles de mayor valor: ser "agentes de servicio", ayudar, acompañar, resolver problemas complejos, en lugar de realizar trámites operativos.
Nuestro concepto 'Digital Airport' busca justamente eso: una experiencia con mucha menos fricción, incorporando biometría, mejorando la accesibilidad, haciendo los aeropuertos más sostenibles energéticamente. Estamos pensando ya a 10-15 años vista. Esto implica también una transformación del personal: pasamos de necesitar operarios a necesitar analistas de datos que procesen la información que generan los flujos de pasajeros y operaciones para tomar mejores decisiones en tiempo real. Pero es crucial, en esta era de IA y digitalización, saber mantener el toque humano en momentos clave del viaje, que es una experiencia muy especial para las personas.
P: La pandemia fue un shock para la industria. ¿Cómo impactó específicamente el área de innovación de Iberia? ¿Fue un freno o un acelerador?
Martín Beitia: Fue un momento complejísimo, pero también de mucha oportunidad. Nos obligó a redefinir nuestro rol esencial: mantener la conectividad y la seguridad. Orientamos toda la innovación a eso: creamos redes de laboratorios para pruebas PCR/antígenos, adaptamos productos como el de Smartvel para informar sobre restricciones, usamos realidad virtual para mostrar cómo higienizábamos los aviones, potenciamos la omnicanalidad para gestionar la avalancha de incidencias... De hecho, los chatbots, que eran un proyecto de innovación, se convirtieron en un área de negocio consolidada durante la pandemia.
Si no hubiéramos hecho esas pruebas de concepto previas, nos hubiera costado mucho más reaccionar. Los años posteriores fueron quizás más incrementales, de robustecer sistemas, crear nuestro Data Lake, el Centro de Excelencia del Dato, digitalizar procesos internos. Ese ciclo terminó el año pasado, y ahora, con el nuevo plan estratégico y el Hub, entramos en una fase muy emocionante, pensando ya en el futuro a largo plazo.
P: La aviación opera bajo un marco regulatorio muy estricto, especialmente en seguridad. ¿Cómo convive la agilidad que requiere la innovación con esta rigidez necesaria?
Martín Beitia: Es un reto constante, y la rigidez tiene que estar ahí; por algo la aviación es la industria más segura. Implica que siempre debemos involucrar a nuestros equipos especialistas, sobre todo de ciberseguridad, y mantener los estándares más altos. Sí, a veces ralentiza las cosas comparado con un entorno puramente startup, pero te da una robustez y una confianza del cliente que no puedes comprometer. ¿Cómo lo gestionamos? Lo mejor posible. Hemos tenido la suerte de desarrollar una colaboración muy estrecha con nuestro equipo de ciberseguridad.
Entienden perfectamente las distintas fases de la innovación (prueba de concepto, crecimiento, escalado) y nos acompañan adaptando los requisitos a cada etapa, lo que nos da mucha agilidad dentro del marco necesario. Lo mismo ocurre con áreas como Compras, Legal o Protección de Datos. Estamos bastante contentos de cómo hemos logrado integrar estos controles sin frenar el impulso innovador.
P: En Iberia y en IAG, ¿la tecnología y la ciberseguridad se ven como un gasto o como una inversión estratégica?
Martín Beitia: Claramente como inversión. Llevamos años hablando en términos de inversión en tecnología. Nuestra división tecnológica, IAG Tech, se transformó hace años hacia un modelo orientado a producto, con squads definidos, etc. Nuestro presupuesto de innovación anual es de muchos millones de euros. Tenemos la ventaja estructural de que las áreas de Finanzas, Transformación y Tecnología han reportado durante mucho tiempo a la misma dirección (nuestro Chief Financial and Transformation Officer), lo que alinea las inercias.
La apuesta ha sido decidida: robustecer sistemas, migrar a la nube, centralizar datos, y ahora, estamos cambiando el modelo de ciberseguridad para tener equipos más cerca del negocio, mejorando la reacción. Cualquier proyecto tecnológico se presenta en nuestros comités como inversión en Capex, nunca como un gasto operativo. Incluso hemos creado una Academia de Tecnología con Globant y Ship2B para formar a los perfiles tecnológicos que necesitaremos en el futuro, adaptados a las nuevas skills que demanda el desarrollo en la era de la IA. Ya han pasado más de 70 personas por ella con resultados muy positivos.
P: Uno de los mayores retos es la descarbonización y el SAF. Siendo realistas, ¿es viable alcanzar los objetivos con la tecnología actual y futura? ¿Cómo aborda Iberia este desafío monumental?
Martín Beitia: Es, sin duda, un reto enorme y complejo. La aviación es solo el 2% de las emisiones globales, pero es un sector difícil de descarbonizar. Nuestro enfoque es multifacético. Por un lado, la renovación constante de flota con aviones más eficientes. Por otro, la optimización de operaciones: rutas más directas, mejores procedimientos de aproximación, etc. Y luego está el SAF. Sabemos que la producción actual es ínfima comparada con la necesidad y que el e-SAF o sintético aún tardará.
Pero el compromiso de Iberia y de IAG es total. IAG fue el primer grupo aéreo en comprometerse con cero emisiones netas para 2050 y está invirtiendo fuertemente. Estamos trabajando activamente, a través de IAG Innovation y alianzas como All4Zero, en originar y apoyar proyectos que ayuden a crear una industria del SAF a gran escala y lo más competitiva posible. Analizamos distintas tecnologías y vías de producción. Creemos que España, por ejemplo, tiene una gran oportunidad para ser un hub de producción de SAF por sus recursos y potencial de energía renovable.
Es un camino difícil, no tengo todas las respuestas hoy, pero la convicción y el trabajo están ahí. También exploramos la compensación de carbono, pero el foco principal es reducir emisiones en origen todo lo posible.
P: Para cerrar, mencionó la convocatoria abierta de IAG Innovation hasta el 30 de abril. ¿Qué representa esta oportunidad para las startups de Latinoamérica?
Martín Beitia: Es una ventana de oportunidad excelente. Es un programa anual donde todas las aerolíneas del grupo (Iberia, British Airways, Vueling, Aer Lingus, Level) ponen el foco. Tiene prestigio y reconocimiento interno, lo que facilita mucho las cosas. Hay procesos internos adaptados (ciberseguridad, legal, compras) para agilizar el onboarding de las startups seleccionadas. El modelo es claro: si eres elegido, entras en un programa de 12 semanas para desarrollar una prueba de concepto (PoC).
Al final, presentas los resultados en un Demo Day ante los comités de decisión de todas las aerolíneas. A partir de ahí, las colaboraciones exitosas pueden derivar en acuerdos comerciales a escala, o incluso en inversión estratégica por parte del fondo de IAG. Las estadísticas nos avalan: después de un año, seguimos trabajando comercialmente con cerca del 50% de las startups que pasaron por la aceleradora, y después de tres años, mantenemos relación con más del 30%, lo cual es un indicador muy potente del valor que se genera.
Así que animo a todas las startups de Argentina y Latinoamérica que tengan soluciones innovadoras en nuestros focos de interés a que apliquen antes del 30 de abril. Nos encantaría ver más talento de la región en el próximo batch y poder contar historias de éxito surgidas de esta conexión que estamos reforzando.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión