El 28 de febrero, desde el centro espacial Satish Dhawan, en Sriharikota (India), tuvo lugar el exitoso lanzamiento del Amazonia-1, primer satélite de observación de la Tierra completamente diseñado, integrado, probado y operado por Brasil. El satélite posee componentes argentinos.

Desarrollado por el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE) de Brasil, el Amazonia-1 proporcionará datos de teledetección (imágenes) para observar y monitorear la deforestación, especialmente en la región amazónica, y también la diversificada agricultura en todo el territorio brasileño con una alta tasa de revisita, buscando actuar en sinergia con los programas ambientales existentes.

Según lo publicado por INPE en su página web, la misión Amazonia también generará datos para el monitoreo de la región costera, reservorios de agua, bosques naturales y cultivados, desastres ambientales, entre otros.

Los datos estarán disponibles tanto para la comunidad científica como para las agencias gubernamentales y para los usuarios interesados ​​en una mejor comprensión del medio terrestre.

La Misión prevé tres satélites de teledetección: Amazonia 1, Amazonia-1B y Amazonia-2.

Además de los objetivos finales asociados con la provisión de datos para el monitoreo del medio ambiente, la Misión tiene un objetivo importante desde el punto de vista tecnológico: la validación de la Plataforma Multi Misión (PMM) como sistema, que será utilizado por primera vez en el Amazonia 1.

 

El satélite

Amazonia 1 tiene una masa de unos 640 kg y se colocará en una órbita solar sincrónica (polar) con una altitud promedio de 752 km, desde la cual generará imágenes del planeta cada 5 días. Para ello, cuenta con un sistema óptico de visión amplia (cámara con 3 bandas de frecuencia en el espectro visible –VIS- y en banda de infrarrojo cercano –NIR-) capaz de observar una franja de aproximadamente 850 km, con una resolución de 60 metros.

Su órbita fue diseñada para proporcionar una alta tasa de revisita (5 días), teniendo, por tanto, la capacidad de proporcionar una cantidad significativa de datos desde un mismo punto del planeta. Esta característica es sumamente valiosa en aplicaciones como aviso de deforestación en la Amazonía, ya que aumenta la probabilidad de capturar imágenes útiles ante la nubosidad de la región.

Los satélites de la serie Amazonia constarán de dos módulos independientes: un módulo de servicio, que es la plataforma multimisión (PMM), y un módulo de carga útil, que alberga cámaras para la toma de imágenes y los equipos para grabar y transmitir datos.

La Plataforma Multi Misión (PMM) es una plataforma genérica (Módulo de Servicio) para satélites en la clase de 500 kg. Con una masa de 250 kg, proporciona todos los recursos necesarios para soportar la operación, en órbita, de diferentes cargas útiles en torno a los 280 kg.

Las principales ventajas de una plataforma multimisión son la reducción de costos y plazos en el desarrollo de nuevas misiones que la utilicen como base, ya que, luego del desarrollo y calificación de la primera plataforma, su reproducción prescindiría de los largos y costosos etapas de desarrollo y calificaciones, típicas de los proyectos espaciales. Otro punto importante a destacar se refiere a aspectos de confiabilidad, ya que las misiones futuras se benefician de la madurez del proyecto.

 

Participación argentina

La misión Amazonia no es solo un hito de gran relevancia para Brasil, sino también para Argentina, ya que incluyó componentes espaciales desarrollados por Argentina y un programa de capacitación y formación de profesionales brasileños.

El comunicado de prensa de INVAP detalla que para la misión Amazonia, la compañía rionegrina proveyó la Computadora Principal de Abordo; el Sistema de Control de Actitud del satélite, compuesto por cajas de electrónica de control de actitud y control de thrusters, barras de torque y magnetómetros, y sensores solares gruesos, estos últimos realizados conjuntamente con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA); y todo el equipamiento de soporte en Tierra para los sub-sistemas.

Esta fue la primer exportación de componentes espaciales del país.

En los más de diez años que implicó el proyecto, INVAP e INPE trabajaron en estrecha asociación, tanto para realizar algunos desarrollos conjuntos, como para capacitar al personal brasileño garantizando la efectiva transferencia de conocimientos no sólo en el uso de los equipos provistos, sino también en todas las áreas de conocimiento necesarias para diseñar, construir, testear y operar un satélite. La entrega de los componentes en Brasil se realizaron en el año 2014, y el contrato finalizó en el año 2016.

 

Lanzador de PSLV

Desarrollado por la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO), el PSLV es un lanzador de cuatro etapas, diseñado para lanzar satélites en órbitas polares sincronizadas con el Sol.

Estas órbitas son particularmente útiles para satélites de teledetección como Amazonia 1, para los que es deseable pasar sobre la misma región a las mismas horas y, por tanto, producir imágenes en las mismas condiciones de iluminación.

Con varias configuraciones de motor (identificadas por los sufijos G, CA, XL y 3S), el PSLV es capaz de transportar una carga total de hasta 1800 kg en altitudes entre 600 y 900 km, aproximadamente.

La India sigue consolidando su posición en el exclusivo mercado de vectores de lanzamiento satelital, como un socio confiable y económico, para entregar cargas espaciales en órbitas bajas.

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Además del Amazonia-1, el lanzador PSLV llevaba otros 18 satélites menores de diferentes orígenes

Finalmente, la importancia estratégica de la Misión Amazonia es que consolidará el conocimiento de Brasil en el desarrollo integral de una misión espacial utilizando satélites estabilizados en 3 ejes, ya que los anteriores satélites de teledetección fueron desarrollados en cooperación internacional con otros países.