Luego de que la justicia argentina respaldase una solicitud de Estados Unidos para confiscar el Boeing 747-300M de EMTRASUR Cargo retenido en Buenos Aires desde hace casi dos años, el gobierno de Venezuela emitió ayer miércoles (3) un duro comunicado manifestando su rechazo a la decisión, la cual definió como «servil a intereses imperiales» para «consumar el robo de la aeronave«, por lo que promete acciones diplomáticas para lo que interpretarían como un «acto hostil«.

El Boeing 747-300M EP-MND había quedado retenido en el aeropuerto de Ezeiza el 8 de junio de 2022 luego de que se detectaran «irregularidades administrativas» en el manifiesto y se decidiera investigar a la tripulación compuesta por ciudadanos venezolanos e iraníes por supuestos vínculos con grupos terroristas.

«Con esta ilegal decisión, el Estado argentino se somete a los poderes del imperialismo estadounidense y viola flagrantemente el Convenio sobre Aviación Civil Internacional, el Convenio de Viena sobre el Derecho de los Tratados, la Carta de Naciones Unidas, el Convenio Bilateral entre la República Argentina y la República Bolivariana de Venezuela y otros acuerdos relativos a la Navegación Aérea Internacional y Derechos Humanos«, reza el comunicado gubernamental.

La administración de Nicolás Maduro asegura haber demostrado «ante todas las instancias jurídicas y políticas internacionales la posesión legal y legítima» del Boeing 747-300M, y dice que «la conducta de pillaje, piratería y vasallaje de la justicia y gobierno argentinos, transgreden su propia legislación y convierten a dicha nación en un grave infractor de la legalidad internacional en materia comercial y aeronáutica«.

Estados Unidos asegura, por su parte, que el avión fue transferido por la aerolínea iraní Mahan Air a la venezolana EMTRASUR, y esta a su vez a otros países como Rusia y de nuevo a Irán violando una ley que prohíbe tratos con entidades sospechosas de terrorismo.

«En 2008, el Departamento de Comercio emitió, y desde entonces ha renovado periódicamente, una Orden de Denegación Temporal que prohíbe a Mahan Air, entre otras cosas, realizar cualquier transacción relacionada con cualquier mercancía exportada desde los Estados Unidos que esté sujeta a la Normativa de Administración de Exportaciones”, habían señalado desde el Departamento de Justicia en agosto de 2022.

«La República Bolivariana de Venezuela efectuará todas las medidas jurídicas, diplomáticas y políticas para salvaguardar los derechos que le asisten«, prosigue el comunicado, y va más allá alertando a la comunidad internacional, pero «en especial a los países latinoamericanos, que cualquier medida ilegal que permita el sobrevuelo y apoyo para consumar este robo será debidamente interpretada como un acto hostil, de soporte al comportamiento vandálico en contra de un país soberano«.

La historia del 747 «iraní» de EMTRASUR

El Boeing 747-300M de EMTRASUR fue entregado originalmente a UTA -Union de Transports Aériens- en enero de 1986, donde operó hasta el cierre de la compañía en 1992, cuando se incorporó a Air France.

Fue retirado del servicio en 2006 y vendido a Mahan Air en 2007. En marzo de 2008, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a Mahan Air por “proporcionar apoyo al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica-Fuerza Qods (IRGC-QF) de Irán”

A principios de 2022, la empresa estatal Conviasa anunció sus planes de expansión internacional: y para ello, se estaba preparando un importante aumento de la flota. Además de las operaciones comerciales de pasajeros, se creó una nueva división de carga: Emtrasur Cargo. Pronto se anunció su primer avión. Un Boeing 747-300M, operado anteriormente por Mahan Air. El avión fue incorporado con la matrícula YV3135 y bautizado como “Luisa Cáceres de Arismendi”.