VIVA retiró en las últimas semanas dos Airbus A320neo que había recibido a fines de 2021. Las aeronaves en cuestión tiene registro HK-5389 (Camila Blaney) y HK-5378 (Go Pink), este último con livery rosado.

El retiro anticipado de ambas aeronaves muestra de alguna manera el estado delicado de la ultra low cost, que Avianca ha venido manifestando y usado como elemento para presionar a las autoridades regulatorias de Colombia a que aprueben la integración de Viva en su grupo.

Desde Aviacionline nos contactamos con la compañía para obtener una declaración sobre este tema pero al momento de esta publicación no obtuvimos respuesta.

La empresa ha suspendido las rutas con menores ingresos y ocupaciones en primera instancia y retrasado las entregas de nuevas aeronaves, incluyendo tres Airbus A320neo que se encuentran listos en la planta de Airbus de Toulouse (TLS), Francia.

Ver También: Avianca: «Estamos tratando de evitar la muerte de VIVA»

Avianca ha mencionado que VIVA se ha retrasado con los pagos de algunas aeronaves, según los lessors que comparten ambas empresas. De hecho, algunos aviones que iban a entregarse a la ULCC se traspasarán a Avianca.

El avión bautizado como Camila Blaney fue recibido el 24 de septiembre de 2021 directamente de la fábrica de Airbus, era el décimo NEO que recibía la compañía. El pasado 23 de diciembre despegó de Bogotá y aterrizó en Tucson (TUS). Go Pink, entregado el 24 de septiembre de 2021 desde Airbus, dejó Colombia el 27 de diciembre y quedó almacenado en Tucson (TUS).

Ante la alta demanda en algunas regiones, los A320neo serán reposicionados en otras compañías.

Una nueva solicitud para que VIVA se integre con Avianca

A principios de noviembre, Aerocivil aseguró que el estudio que llevaron adelante concluye que la integración representa riesgos para la competencia en el sector aerocomercial y el bienestar de los consumidores, y que devolvería el entorno competitivo siete años atrás.

En noviembre, Avianca y VIVA presentaron ante la autoridad aeronáutica colombiana una nueva solicitud.

Ambas compañías han propuesto devolver un porcentaje relevante de slots en el aeropuerto El Dorado de Bogotá y ceder slots con activos asociados a competidores, para que así otras aerolíneas puedan expandir su presencia en la principal terminal de Colombia.

En segundo lugar se comprometen a mantener la marca Viva y el modelo low-cost asociado, preservar el «mayor número de empleos, conservar una cantidad de sus aviones y la operación de las rutas en las que viva vuela de manera exclusiva».

Por otro lado, plantean habilitar una protección tarifaria en las tres rutas en las que ambas compañías operen el 100% de la oferta.

En cuarto lugar, Avianca y Viva proponen realizar acuerdos de código compartido o interlínea con la aerolínea estatal Satena, en aquellas rutas en las ésta sea la única operadora, para así fortalecer su rol social y dar más competitividad a territorios aislados de Colombia.

Por último, también se comprometen a mantener los acuerdos interlínea que Viva ya posee con otras compañías aéreas.